El volante del conjunto Millonario dice que entre él y Ledesma manejan los tiempos del equipo. Asegura que Ramón Díaz le encontró su lugar en la cancha. Y se entusiasma con los cuatro partidos que faltan para el final.
Escucha la pregunta y responde enseguida, como si estuviera esperando hablar de eso.
–¿Qué es un armador de juego hoy en el fútbol argentino?
–Yo creo que hay dos por equipo. La mayoría de las veces es porque resulta imposible que un jugador solo sea el armador. En el caso del enganche, si hay, le tiene que llegar bien la pelota, desde abajo, desde mitad de cancha. Siempre hace falta una asistencia para que el jugador desequilibrante, el pensante, pueda funcionar.Ariel Rojas llegó a River ofreciendo promesas en su zurda. Ahora, las regala desde su cabeza. Una consecuencia de un impulso armado un poco por Ramón Díaz y otro poco por la necesidad de un equipo que necesitaba alguien que manejara los tiempos. Estratega, pensador, brazo izquierdo del Lobo Ledesma, el volante abre las puertas de su cabeza hecha pelota.
–¿Sos el armador de este River?
–Yo creo que nos vamos repartiendo según el sector del campo. Ledesma es el primero que marca cómo hay que hacer el ataque. Él decide si vamos a ir rápido o lento. El Lobo y yo manejamos los tiempos. Nuestro trabajo es que las jugadas no se vuelvan confusas. Tratamos de romper esa línea de volantes para que el que termine decidiendo en esa última línea sea Manu (Lanzini). Él es muy bueno cuando queda en tres cuartos rival y sabe decidir. Él sabe si abrir, si ser profundo, creo que lo está haciendo cada vez mejor.
–¿Por qué apuestan al toque en el medio?
–Porque en algún momento el rival se desespera. Cuando vos triangulás y lográs tener la pelota en espacios cortos, no hay manera de que el rival no se desordene. En algún momento, se va a desesperar, va a quedar mal parado. Ahí está nuestra inteligencia de aguantar hasta que eso pase. Si logramos tener esa circulación, logramos ganar espacio para que Lanzini quede cara a cara con la defensa rival. El objetivo es tener superioridad en el medio.
–¿Cómo se trabaja eso?
-–Siempre hay que pensar que donde va la pelota hay que agruparse. Muchas veces triangulamos por el sector del medio, pero hay que ir moviendo el triángulo. A veces hay que buscarlas por el sector izquierdo o por el derecho. Lo vamos charlando entre nosotros. Nos decimos: “Ché mirá que ellos defienden así.” Y después nosotros vamos para ese lado. Es un conjunto de todo. Primero hay un trabajo en la semana con el técnico en lo táctico y después una charla entre nosotros para saber leer el partido.
–En el fútbol argentino, ¿es más fácil mover la pelota para afuera o para adentro?
–El fútbol nace siempre de adentro. Si no generás adentro, no generás afuera. La pelota hay que darla hacia afuera cuando hay chances de un mano a mano. Por dentro hay que abrirla y hacer la diferencia.
–Vangioni dice que vos sos el que mejor lo entiende.
–Sí, pero es porque lo charlamos. Hay que escuchar al compañero, saber de qué manera se siente cómodo. A él le gusta ir por afuera, bien por afuera, le gusta trasladar la pelota, tiene un buen mano a mano. Hay que saber aprovechar eso. Es importante los movimientos de los delanteros para que él encuentre los espacios. El otro día Vangioni necesitaba de Funes Mori para encontrar espacios.
–¿River es un equipo de juego corto o largo?
–De juego corto. Es algo que hay que trabajar porque, si en algún momento no acelerás o no cambiás el ritmo, terminás siendo intrascendente. Entonces nosotros tratamos de agregarle dinámica.
–El campeonato pasado alternabas entre ser titular y suplente, ¿qué pasó para volverte clave?
–Hubo un cambio, en principio, pude hacer la pretemporada. Y después creo que el entrenador me fue dando confianza. Ramón me encontró el lugar en el equipo.
–¿River y Newell’s son los dos mejores equipos del torneo?
–Hoy somos los que estamos mejor en esta etapa del torneo.
–¿Les gustaría jugar de nuevo contra Newell’s?
–Sí. Pero lo que pasó, pasó. Ya no sirve lamentarse ahora. Ese partido no sé si jugamos bien, pero no hubo mucha diferencia, fue un partido muy parejo. Hoy estamos en una etapa en que el equipo sigue creciendo. El tiempo va a hacer que River sea cada vez mejor.
–¿Por qué pueden ser campeones?
–River demostró que siempre quiere jugar a la pelota. Estas cuatro fechas van a ser fundamentales. Pero creo que estamos cerca de lograr lo que nos propusimos.